Hola amigos,
Paso a relataros mi penúltimo rastreo no resuelto sobre jabalí y ya van dos seguidos.
Me llamó un cazador para intentar recuperar un espléndido jabalí que había tirado cazando a la menor. El animal venía huido de una batida cercana y al cruzar un pequeño curso de agua se encontró de cara con el cazador, éste le disparó los dos cartuchos del 8 a escasos metros, cambió a bala y le dió tiempo a colocarle el primer disparo en el costillar y con el segundo, ya con el animal tapado, no estaba seguro de haberle alcanzado.
Total dos disparos con perdigón y uno con bala de escopeta que hicieron blanco, el animal marchó tambaleante y dando algo de sangre (poca) hasta alcanzar la media ladera del curso de agua y desde allí se perdió faldeando.
Se trataba de un animal grande y en todo su esplendor pues el cazador tuvo tiempo de verlo perfectamente y muy de cerca.
Al día siguiente fuí a intentar recuperarlo, comenzamos el rastreo en el último indicio, un cuajarón de sangre que las zorras habían limpiado a conciencia durante la noche, no obstante, estaba señalado el lugar conveninetemente y comenzamos allí el rastreo, estabamos en el borde de un camino.
La perra tomó el rastro y se internó en una pequeña mancha de romeros altos que había junto al camino, allí nos entretuvimos sin encontrar más indicios, imagino que el jabalí buscaría encame y al escuchar cerca al cazador que lo estaba pisteando después del lance, seguiría su camino. Encontramos dos diminutas gotas de sangre muy roja y cruzamos el camino sin encontrar nada más, así seguimos unos 100 metros hasta el siguiente indicio, una pequeña gota muy roja más, seguimos avanzando hasta el borde de un reguero poco profundo con las laderas de tierra muy empinadas y que yo pensaba que no habría podido salvar el animal herido, de hecho no se observaba ninguna bajada, ni arrastres en la tierra. Al llegar al borde del reguero la perra perdió el rastro y volvimos hacia atrás, después de reencontrarlo llegamos la mismo borde del reguero que antes, así que imaginé que seguramente habría podido cruzarlo.
La perra bajó una ladera y subimos a la otra y arriba encontramos una piedra manchada de sangre al roce, por todo lo visto ibamos bien, despacio, pero en la buena dirección, así seguimos unos 100 metros más, encontrando sólo dos diminutas gotas de sangre hasta perder completamente el rastro en una zona cubierta de pinocha.
Rastreé desde el último indicio encontrado con otra perra pero llegamos al mismo punto muerto, una zona umbría y cubierta de pinocha dónde las dos perras perdieron el rastro definitivamente y después de tres horas largas dimos por finalizado el rastreo sin recuperar el jabalí.
Es el segundo jabalí que no recuperamos, además de forma consecutiva y en los dos casos hay similitudes que creo que han influido en no recuperarlos. Os las comento a ver cual es vuestra opinión.
En ambos casos hemos comenzado el rasteo en los últimos indicios marcados por los cazadores, no en el anchuss pues, los cazadores intentando recuperar el animal por su cuenta habían perdido las referencias del lugar del tiro y sólo acertaron a marcar la última sangre que encontraron.
En ambos casos habían intentado recuperarlos con varios perros inmediatamente después del lance y nosotros hemos rastreado, al menos en parte, una zona ya trasteada por perros y personas después de pasar el animal herido.
En ambos casos no he podido soltar los perros con el Garmin pues eran zonas con cultivos cercanos de olivo y ahora están en plena recolección.
En los dos casos los rasteos han sido cortos, alrededor de 600 metros. Quizá estos aspectos no tengan mayor influencia pero creo que nos han ayudado más bien poco en los rastreos.
Y por cierto, es el tercer rastro que perdemos al entrar en una zona cubierta de acículas de pino, quizá sea coincidencia pero..... ya empiezo a mosquearme cuando veo una zona así que tenemos que cruzar en un rastreo.
Gracias y saludos