Hola buenas tardes amigos
Una ves más AEPES acude a la llamada de un cazador ,en este caso un permiso autorizado por daños a los cultivos, el jabalí de tamaño mediano fue tirado ayer sobre las 22:00 horas.
Esta mañana acudo a la llamada y a las 8:30 contactamos con el cazador Manuel y un amigo y compañero de este Antonio.
Según la manifestación sobre el Anschuss, el marrano le sale del barranco a un sembrado de avena a unos 15-20 metros, este se queda mirándolo de cara un poco girado y le sacude candela.
El jabalí se tira al barranco dando tumbos y gritando a pulmón lleno, desde la ubicación del lugar del tiro oye ruido del jabalí, hasta la confluencia de este barranco con otro que desemboca unos 200 metros más abajo.En este otro barranco se para el ruido
.
En la inspección del Anschuss no se aprecia indicios, ni sangre ni pelo, empezamos con el perro( Bartolo), atraillado y a unos metros se ve la primera sangre, aquello es un infierno de zarzas, cañas, espinos y troncos podridos de arboles caídos .
Ante las dificultades del terreno optamos por soltar el perro, pues era imposible sujetar la trailla. El perro se fija en el rastro y vemos sangre en las partes altas, de algunas de las gateras por donde circulan estos animales, alguna rama marcada con poca sangre a lo largo de otros 150-200/m. El verdadero problema es avanzar.
El perro avanza y viendo que no podemos seguirlo, vuelve a por nosotros. La faena nuestra es poder pasar por un agujero de 50/cm, no queda más remedio que agrandar el paso y eso es lento,
El perro va y viene consecutivamente y cada vez que vuelve y avanzamos se pone muy contento, sabe el problema que tenemos de avance y parece que nos comprende, seguimos su instinto y llegado un momento al cabo de dos horas y media ante la falta de indicios, los lagos de agua encontrados en el trayecto y viendo la posibilidad de que el animal, que ha llegado hasta aquí, esta lo suficientemente entero , optamos por desistir y dar por concluido el rastreo.
Conclusiones:
Primero la situación física de los tres, era de agotamiento casi total, el esfuerzo titánico para llegar donde hemos llegado El perro ha hecho una faena de maestro.
El cazador y su amigo, dos excelentes personas, buenos cazadores y conocedores expertos de este oficio.
El rastreo y la ( Posible herida del animal ),creemos que la parte superior de la paletilla izquierda tocada, de ahí los gritos del jabalí, ( joven ), por lo doloroso al enredarse con la zarzas y espinos, poca sangre en la mitad del trayecto de unos 800/m falta de sangre en el tramo final y el perro ya no podía más, quería pero las posibilidades eran muy pocas .
Reflexión:
Toda actuación tiene su lado positivo y eso es lo verdaderamente importante, AEPES ha asistido a una llamada, nos ha tocado lidiar ese porcentaje de" no encontrados" pero hemos encontrado algo más importante, dos buenos amigos, que no sabían lo que era esto y han mostrado mucho interés en el arte de rastreo con perros de sangre.
Personalmente no estoy contento, pero si satisfecho por el trabajo realizado, dar a conocer el espiritu de AEPES, conocer dos nuevos amigos , abrir una puerta más para otra nueva aventura y por último la posibilidad de aumentar la familia.
Un fuerte abrazo