Hola Pedro:
Comenzaré diciéndote que es norma de este foro firmar las intervenciones con nombre y apellidos.
En esto del entrenamiento de perros de sangre, como en todo, cada maestrillo tiene su librillo. Yo te daré unos sencillos consejos para que puedas arrancar.
Una vez esté debidamente vacunado debes acostumbrar a tu cachorro a los distintos olores y sensaciones del campo, sacándolo a dar paseos por terrenos con distinta vegetación. No debes evitar las zonas de vegetación espesa, los pinchos, el agua, etc. Tiene que acostumbrarse a todo, a los ruidos fuertes también. Sería prudente tener en cuenta, en esta fase, que más tarde nos interesará que al cachorro no le llamen demasiado la atención los rastros calientes.
Como norma general deberás ser paciente y comprender que tu meta es que el perro sepa que es lo que tú quieres de él. Cuando lo sepa, se desvivirá por hacerlo. Para ello deberás animarle y felicitarle con repetidos y efusivos halagos, sin miedo al ridículo, cuando haga las cosas bien. Cuando no lo haga bien deberás indicarle pacientemente los indicios del rastro animándolo a seguirlos y felicitándole repetidamente cuando así lo haga.
Para la realización de los rastros de entrenamiento lo ideal es tener sangre de caza o de vacuno, mezclada con sal y congelada en pequeñas botellas, así como trozos de piel de jabalí, corzo, venado, etc, también congelados y que podrás utilizar en tres o cuatro ocasiones cada uno.
Iniciación en el rastreo.
Hay perros que no necesitan rastros de arrastre de pieles porque siguen el rastro de sangre, desde un principio, de forma intuitiva. Si no es el caso de tu cachorro comenzarás los entrenamientos con rastros realizados mediante el arrastre de trozos de pieles. Estos rastros deberán de ser cortos, rectos, y de no más de veinticinco pasos, separados del rastro que vayas dejando tú al caminar y dejando la piel al final del mismo. Se pondrá el cachorro en el rastro transcurridos unos minutos. El perro deberá llegar a la piel siempre, por el rastro marcado, bien sea por sus medios o con tu ayuda. Deberás incitarle a jugar con la piel, a morderla y felicitarle efusivamente. Cuando realice estos rastros con facilidad comenzarás a alternar en el rastro tramos de piel arrastrada y tramos de sangre mediante goteo abundante, siendo en los sucesivos rastros más largos los tramos de sangre y más cortos los de piel, hasta poder eliminar esta totalmente. La transición de piel a sangre no debería llevarte más de seis u ocho rastros de cuarenta o cincuenta pasos, pero cada perro es un mundo y tú debes tener paciencia y saber valorar su trabajo y reacciones para que el perro no pierda confianza ni interés. A partir de ahí tu cachorro estará iniciado en sencillitos rastros de sangre.
El rastro de sangre.
En esta etapa, es importante que los rastros estén siempre marcados de manera que el conductor no tenga ninguna duda de por donde van en cada momento. Para ello deberás proveerte de los materiales que consideres necesarios.
Los rastros comenzarán siendo cortos, no más de cincuenta pasos, rectos, con sangre abundante y en un terreno bueno para rastrear. (mejor húmedos que áridos y con vegetación y orografía fácil para el cachorro). Se depositará una piel al final de cada rastro y el cachorro deberá llegar a ella siempre y por el rastro. Se irán alargando los rastros de forma progresiva hasta los cien pasos, momento en el que se podrá ir reduciendo en cada uno de ellos la cantidad de sangre aportada hasta que quede reducida a una gota cada cincuenta centímetros, más o menos. Cuando el cachorro haga estos rastros con facilidad se comenzará a demorar, poco a poco, el inicio del rastreo hasta un máximo de cinco horas (H5). No se avanzará en la antigüedad de los rastros mientras el cachorro no haga con confianza y con ganas los anteriores. Cuando tu perro haga estos rastros de cien pasos y H5 sin dificultad podrás ir dándoles algún giro y alargándolos hasta los 300 metros o más dependiendo de la edad y del físico del perro, que debe ir siempre motivado. Ni aburrido, ni cansado. Cuando tengas un perro que hace rastros de más de 300 metros y H5, dará comienzo la etapa más difícil del adiestramiento, que no es otra que la conjunta del perro y su conductor.
En esta fase del adiestramiento deberíamos tener un perro que, con 25 ó 30 pequeños rastros, ya intuye lo que queremos de él y que tratará de complacernos siguiendo su instinto. El problema es que, en adelante, muchas veces no le resultará nada sencillo y necesitará de la inestimable colaboración y experiencia de su conductor……………
Creo que con estos sencillos consejos podrás darte una idea de cómo empezar el adiestramiento de tu cachorro. Yo te recomendaría que acudieses a alguna reunión de la AEPES, donde podrás aclarar tus dudas, ver como se marcan y siguen los rastros y conocer gente con experiencia que te ayudará a iniciarte en esta noble actividad.
Entre tanto, recibe un cordial saludo.